Mi Apreciado Doctor

 Mi Apreciado Doctor

Mi Apreciado Doctor

Mi apreciado doctor. Apreciado Doctor Landinez : Hace dos semanas por nada del mundo le hubiera escrito a usted esta carta, que es una carta de agradecimiento. Hoy no sé si quisiera volverlo a encontrar en mi vida, pero al menos sé con certeza que no me amargaré con su recuerdo, ni cargaré con pesos emocionales mi dura y dolorosa experiencia como su alumna.

Estoy feliz de haber terminado mi internado, para mí fue una pesadilla más que recibir mi grado; me alegro no tener que manejar más la tensión de mi relación con usted, creo que usted  hizo lo posible por hacerme la vida más difícil. Mi apreciado doctor

En toda mi carrera de medicina con lo dura y exigente que fue y mi compromiso de ser siempre la mejor estudiante, sin importar que tuviera que esforzarme lo que fuera, nunca, nunca nadie fue conmigo como  usted. Usted me cargó con más pacientes que a ninguno de mis compañeros. Usted me pedía que supiera cosas que a nadie más le exigía.

Cuando me esforzaba para que todo estuviera bien, usted se fijaba en el pequeño detalle que se me había pasado, me gritaba y me invalidaba delante de todos mis compañeros, los pacientes y el personal del hospital.

No importaba lo que yo hiciera, usted tenía para otros que se esforzaban menos y nunca para mí las palabras gentiles y el reconocimiento. Mi apreciado doctor

Cuando pasé por momentos difíciles en mi vida personal, usted no me dio respiro, a pesar de que usted sabía por qué estaba pasando yo, jamás me dio un permiso adicional o fue tolerante conmigo.

Cuando traté de buscar una tregua,  un acercamiento con usted aunque me comiera mi orgullo y mis emociones, solo encontraba su frialdad, sus  chistes mordaces o sus comentarios invalidantes.

Fueron muchas las noches en las que le dediqué mis desvelos y los momentos gratos que nuble, porque solo pensaba en el problema que usted se convirtió para mí en mi vida, pues no me podía dar el lujo de perder su curso. Mi apreciado doctor

Le confieso que en toda mi vida, nunca había tenido tantas fantasías peleando con alguien en mis pensamientos o deseando lo peor para usted, por eso quiero disculparme, porque decidí que usted, aunque no me quisiera fue mi mejor maestro.

Gracias por que usted me ayudó a encontrar que puedo manejar mucho más de lo que antes ni soñaba. Mi apreciado doctor

Gracias porque me enseño que puedo hacer mi trabajo con excelencia a pesar de mis emociones negativas o mis tormentos emocionales.

Gracias porque me enseñó a enfocarme en buscar lo mejor de una persona a pesar de que ella haga todo lo posible para mostrarme lo peor de ella. Mi apreciado doctor

Gracias, porque me enseñó a no condicionar la calidad de mi trabajo a la aprobación fácil de otros, y a saber que lo que tengo que hacer lo tengo que hacer por mi aunque nadie lo reconozca.

Gracias por enseñarme a ser más leal a mi corazón y a mis valores que a las salidas o conciliaciones fáciles.

Gracias por haber sido mi mejor maestro, porque ahora sé que un buen maestro es el que me lleva a encontrar lo mejor de mí.


Mi apreciado doctor

Valor de Persistencia

 Valor de Persistencia
Valor de persistencia

Valor de persistencia. María de los Ángeles servía el café a los ejecutivos y limpiaba las oficinas de una empresa, saludaba a cada persona de la oficina cada día, como si fuera su hijo más querido a quien se encontrara después de un tiempo.

Reconozco que al comienzo me sentí un poco incómodo con ella, sentí como si su calidez fuera demasiado, en realidad no lo era, solo que contrastaba con la forma social y calculada con la que todos nos saludábamos en la oficina.

María de los Ángeles me hacía sentir especial, aunque yo sabía, que ella era así con toda la gente. Valor de persistencia

Ella era una persona muy sencilla, que apenas había terminado sus estudios de primaria, no obstante hoy después de muchos años la recuerdo como alguien de quien aprendí mucho.

Yo era uno de los ejecutivos de esa empresa  y recuerdo un día en el que María de los Ángeles me contó que quería hacer un curso técnico que ofrecía el gobierno, para el que necesitaba unos requisitos, que no estaba claro si ella cumplía.

Por esto ella requería la autorización de un funcionario medio del gobierno local, que no era fácil de lograr, pues no solo había más candidatos que cupos para ese curso, sino que la influencia política con la que María de los Ángeles no contaba era un factor muy importante.

Después alguien me contó cómo María de los Ángeles pidió cita con el funcionario quien la recibió con frialdad y comenzó diciéndole que ella no cumplía las condiciones. Valor de persistencia

María de los Ángeles había tenido el cuidado de preguntar antes de entrar el nombre del funcionario y durante toda la entrevista se refirió a él con el respetuoso y cálido, señor García..., Si señor García..., Usted sabe como es señor García..., dígame lo que tengo que hacer señor García..., Yo se que usted hará lo mejor posible señor García...  y desde ya se lo agradezco señor García...

Al final de la primera entrevista la cosa no parecía nada prometedora para María de los Ángeles, el señor García casi por quitársela de encima le dijo que, miraría si algo se podía hacer que tenía que esperar, así que María de los Ángeles pidió 8 días de vacaciones de su trabajo. Valor de Persistencia

Al día siguiente se paro frente de la oficina del señor García, quien al llegar le dijo a  María de los Ángeles, que aún no había decidido lo de ella, que tenía que esperar, a lo que María de los Ángeles respondió con su calidez habitual

-       No importa señor García, yo espero,  haga de cuenta que no estoy aquí-

Al medio día al salir para su almuerzo el señor García se encontró de nuevo con María de los Ángeles y ella lo saludo con una sonrisa discreta desde el otro lado del pasillo.

En el mismo lugar, la encontró el señor García al llegar de Almorzar. Valor de persistencia

Cuando llegó al día siguiente, la encontró allí de nuevo, el señor García se le acercó y le dijo con un tono enfático a María de los Ángeles:

-       Señora, ya le dije que eso se demora,  venga en unos días,
María de los Ángeles respondió con toda la paciencia:

- Tranquilo señor García yo no quiero molestarlo,  ni me diga nada,  hasta cuando no tenga usted una respuesta, pero para mí eso es muy importante y yo puedo esperar aquí tranquilita, haga de cuenta que soy invisible señor García..

Este ritual se repitió día por día, María de los Ángeles en estos días no pidió hablar con él, ni lo saludo a menos que él lo hiciera, ni le hizo mala cara, ella esperó con su rostro cálido y su sonrisa serena. Valor de persistencia

Solo pasaron cuatro días para que el señor García aceptara a María de los Ángeles en el curso y se rindiera a ese dulce fantasma que le enseñó el valor de la persistencia.

Amigo/a, cuando has buscado lo que quieres con determinación, has encontrado los mejores caminos, por encima de tu ego y de tus miedos.
Cuando quieres tu sabes cómo hacerlo...


Valor de persistencia

Consejo del Sabio

 Consejo del sabio
Consejo del sabio

Consejo del sabio. Se trataba de dos jóvenes que sentían un profundo e inmenso amor respectivamente. Habían decidido vivir juntos, pero tenían miedo que la convivencia pudiera malograr o disminuir su apasionado amor.

Decidieron visitar a un hombre muy anciano que tenía fama de sabio.

- Respetable sabio, nos permitimos importunarte porque nuestro corazón está confundido. Estamos necesitando la luz de tus consejos. Consejo del sabio

El anciano los miró. En su arrugado rostro resaltaban unos ojos magníficos y comprensivos. Una ligera sonrisa brilló en sus labios y respondió con la cabeza.

- Nos amamos tanto -dijo ella- que queremos vivir juntos, pero tenemos miedo. Nos gustaría pasar toda la vida en compañía del otro, pero sabemos que no siempre es fácil y por eso buscamos tu consejo.

El anciano se dio cuenta que estaban sumamente enamorados el uno del otro. Le conmovió ese enamoramiento que parecía empapar esos cuerpos tan jóvenes y esbeltos. Consejo del sabio

- Yo no hago otra cosa que dedicarme a la meditación -dijo el sabio-, pero quiero ayudarlos, claro que sí. ¿Harán lo que les diga?

- Evidentemente -dijeron ambos al unísono.

El anciano dirigiéndose al joven dijo:
- Ve a las tierras del norte y allí encontrarás un pico que se destaca sobre los otros, morada de formidables halcones. Toma el más poderoso y sin dañarlo, tráemelo. Consejo del sabio

Y le dijo a la joven:
- Tú, dirígete a las tierras del sur y allí verás un pico que sobresale sobre los demás, morada de hermosas y valerosas águilas. Toma el mejor ejemplar y sin dañarlo, tráemelo.

Los jóvenes se entrelazaron en un sentido y amoroso abrazo y cada uno partió en una dirección. Fueron difíciles semanas de separación, pero cada uno de ellos consiguió el mejor ejemplar en su especie. Volvieron hasta el bosque donde vivía el anciano sabio y se los mostraron. Consejo del sabio

- Ahora quiero que aten por las patas al halcón y al águila.

Extrañados, así lo hicieron, sin entender las intenciones del sabio.

- Les pido ahora que observen con mucha atención y nunca olviden lo que van a ver.

El halcón y el águila, atados por las patas, intentaron emprender el vuelo, pero una y otra vez fracasaron en el intento. Luego de repetidas e inútiles tentativas, comenzaron a picotearse violentamente entre ellos.

- ¿Se dan cuenta? Nunca dejen de recordar lo que han visto. Ustedes son como un halcón y un águila, pero si se atan, en lugar de ponerse alas de libertad y respetarse el uno al otro, serán como estos magníficos ejemplares, que sólo no pueden remontar el vuelo, sino que se quieren destruir mutuamente. Para que el amor prevalezca tienen que amarse mucho, sí, pero sin ningún tipo de exigencias ni de ataduras. Consejo del sabio

Los jóvenes miraron con agradecimiento al anciano y luego se contemplaron entre sí, pero sabiendo que si querían que su amor perdurase por toda la vida, era necesario "volar" juntos, pero no encadenamos el uno al otro.

Porque cuando se ama se tiende a invadir el espacio de los demás y a dejarse ganar por tendencias de imposición, exigencias o persuasión, por muy sutil que sea la apariencia de estas últimas.

Consejo del sabio

La Mujer Perfecta


La Mujer Perfecta

La Mujer Perfecta. Nasrudín conversaba con sus amigos en la casa de té y les contaba como había emprendido un largo viaje para encontrar a la mujer perfecta con quién casarse. Les decía:

- Viajé a Bagdad, después de un tiempo encontré a una mujer formidable, atenta, inteligente, culta de una gran personalidad. La Mujer Perfecta

Dijeron sus amigos:
- ¿Por qué no te casaste con ella?
- No era completa, -respondió Nasrudín-, después fui a El Cairo, allí conocí a otra mujer ciertamente fabulosa; hermosa, sensible, delicada, cariñosa.
- ¿Por qué no te casaste con ella?, dijeron los amigos. La Mujer Perfecta
- No era completa -respondió nuevamente Nasrudín-, entonces me fui a Samarcanda allí por fin encontré a las mujer de mis sueños; ingeniosa y creativa, hermosa e inteligente, sensible, culta, delicada y espiritual.
- ¿Por qué no te casaste con ella? -insistieron sus amigos. La Mujer Perfecta
- Pues saben por qué, ella también buscaba a un hombre perfecto.

Maestro: Al aceptar que eres perfecto, al aceptar que todos somos perfectos tal como somos … ya no habrá necesidad de buscar la perfección lejos.

La Mujer Perfecta

Fuente: tradicional Sufí

Hércules y la montaña


Hércules y la montaña

Hércules y la montaña. Cuando Hércules era un joven de delicado rostro que tenía la vida por delante, salió una mañana para cumplir con un encargo de su padrastro. Pero su corazón estaba lleno de amargos pensamientos, y renegaba porque otros, que no eran mejores que él, llevaban una vida cómoda y placentera, mientras que su vida estaba cargada de trabajo y dolor. Hércules y la montaña

Mientras pensaba en esto, llegó a un lugar donde cruzaban dos caminos, y se detuvo sin saber cuál tomar. El camino de la derecha era accidentado y tosco. No tenía belleza, pero Hércules vio que conducía directamente hacia las azules montañas de la lejanía. El camino de la izquierda era ancho y despejado; a ambos lados tenía árboles donde cantaba un coro de aves, y serpeaba entre verdes vegas donde florecían las más bellas flores. Pero terminaba en la niebla y la bruma, sin llegar a las maravillosas y azules montañas.

Mientras el joven meditaba su decisión, vio que dos bellas mujeres se le acercaban, cada cual por un camino. La que venía por el camino florido llegó primero, y Hércules vio que era hermosa como un día de verano. Tenía mejillas sonrosadas y ojos resplandecientes, y hablaba con palabras cálidas y persuasivas. Hércules y la montaña

-Oh noble joven –dijo-, no te sometas más al trabajo y los esfuerzos. Sígueme y te conduciré por sendas amenas donde no hay tormentas que te perturben ni problemas que te fastidien. Vivirás cómodamente, en una ronda incesante de música y alegría, y no te faltará nada que alegre la vida: ni chispeante vino, ni mullidos divanes, ni ricas túnicas, ni los adoradores ojos de bellas doncellas. Ven conmigo, y la vida será como una ensoñación.

Para entonces la otra mujer se había acercado, y también le habló. Hércules y la montaña

-No tengo nada para prometerte -dijo-, salvo aquello que ganarás con tu propia fuerza. El camino por el cual te conduciré es irregular y escabroso, y trepa por muchas colinas y desciende en muchos valles y hondonadas. Los paisajes que verás desde las cimas a veces serán majestuosos e imponentes, pero los profundos valles son oscuros, y el ascenso desde ellos es trabajoso. No obstante, ese camino conduce hasta las azules montañas de inmortal fama, las cuales divisas a lo lejos. No puedes llegar a ellas sin esfuerzo; más aún, no hay nada que valga la pena tener que no se deba ganar mediante el trabajo. Si deseas flores y frutos, debes plantarlos y cuidarlos; si deseas el amor de tu prójimo, debes amarlo y sufrir por él; si deseas gozar del favor del cielo, debes hacerte digno de él; si ansías la fama eterna, no debes desdeñar el duro camino que a ella conduce. Hércules y la montaña

Hércules vio que esta dama, aunque era tan bella como la otra, tenía un semblante puro y gentil, como el cielo en una cálida mañana de mayo.

-¿Cómo te llamas? –preguntó.

-Algunos me llaman Trabajo –respondió ella-, pero otros me llaman Virtud.

Hércules se volvió hacia la primera dama.

-¿Y cuál es tu nombre? –preguntó.

-Algunos me llaman Placer –dijo ella, con una sonrisa seductora-, pero prefiero hacerme llamar Dicha y Alegría. Hércules y la montaña

-Virtud –dijo Hércules-, te escojo como guía. Mío será el camino del trabajo y del esfuerzo, y mi corazón ya no albergará amargura ni descontento. Y apoyó su mano en la mano de Virtud, y entró con ella en el recto y temible camino hacia las bellas montañas azules del lejano horizonte.

James Baldwin


Hércules y la montaña

Sopa de piedras


Sopa de piedras

Sopa de piedras. En la edad media llega  a un pequeño pueblo un hombre hambriento, y cansado después de un largo viaje.

Caminó  las dos cuadras que conformaban el pueblo sin encontrar en donde comer o quien le ofreciera algo para cenar.

Nadie quería compartir comida con el extraño.

Este manteniendo su entusiasmo, se ubicó en lugar en la calle en donde lo veían la mayoría de los pobladores. Sopa de piedras

Tomó unos trozos de leña y como si hiciera un ritual armó una fogata, dejó que el fuego prendiera con vigor y se dirigió a la casa más cercana, en la que en la ventana una señora de mediana edad curiosa observaba al viajero.

Buenas señora - le dijo el hombre a la señora  - yo no vengo a pedir comida, vengo a compartir.

¡Además le enseñaré a quien quiera a cocinar la más deliciosa sopa de piedras que nadie nunca haya comido!

¿Sopa de piedras? respondió la señora , entre aséptica e interesada -  ¿Cómo es eso ?

Bueno todo lo que necesito es una olla y un poco de agua -  Le dijo el viajero-

La señora le entregó lo que pedía, el hombre agradeció y caminó hacia su hoguera que continuaba ardiendo y puso la olla y el agua sobre el fuego.

Venga señora le mostraré algo que no olvidará - dijo el hombre con entusiasmo, y buscó cuatro piedras que eligió entre varias, las miró de nuevo como si buscara algo en especial. Sopa de piedras

Sacó un poco de agua de la olla, lavó las piedras, las miró de nuevo una a una y las puso con cuidado dentro de la olla.

Esto, ante la mirada atónita no solo de la dueña de la olla sino de otros vecinos que se fueron reuniendo en torno al fuego.

¿Quieres compartir de mi sopa de piedras? -  Le dijo el viajero a uno de los curiosos.

- Entonces no te quedes ahí mirando y  trae una cebolla -

Y tú - Le dijo a otro - Si no quieres perderte de esta delicia trae un poco de carne.

Y tú - señaló a otra mujer, trae unas papas.

Así que cada uno fue trayendo lo que tenía o le habían pedido.

Al poco tiempo todos comenzaron a conversar entusiastas entre sí  y pronto el olor de una deliciosa sopa alegró las narices y luego los paladares de todos  que disfrutaron no solo la sopa de piedras, sino la receta para compartir y crear un equipo donde todos parecían apáticos.

Poco después el viajero partió discreto al siguiente pueblo…

Lo que no puede hacer una sola persona, lo pueden fácilmente hacer varios.

El trabajo en equipo no depende de los demás, depende de tu actitud para trabajar y crear equipo con otros, con quien en vez de quejarte podrías construir más equipo.


Sopa de piedras

Pintar con pincel

Pintar con pincel

Pintar con pincel. "Había una vez un pincel que era la admiración de todos los demás lápices, pinceles y crayones, puesto que con él habían sido pintados los cuadros más hermosos que habían salido de ese taller. Cuando el pintor tenía que realizar una obra de calidad o un trabajo muy importante, siempre acudía a él, puesto que sus suaves cerdas eran las que más finos y delicados trazos imprimían sobre el lienzo, y le daban un toque especial a cada detalle de la obra. Esto llenaba de orgullo a nuestro amiguito, que solía pasearse orondo por el taller, mirando por encima del hombro a los demás elementos de dibujo, puesto que sabía que él era el mejor. Todas las fibras y acuarelas del taller suspiraban por el galán. Pintar con pincel

Cierto día, un viejo plumín de tinta china, envidioso porque nuestro amiguito era el centro de la atención femenina del taller, sembró en él una inquietante cizañita. Le dijo: "¿Tú te crees muy bueno? Pues lamento informarte que tú solo no vales nada. Jamás decides tú qué es lo que pintarás, o qué colores utilizarás, sino que eres un miserable esclavo del pintor que es quien te usa como a él se le da la gana". Esto inquietó al pincelito. ¿Sería verdad lo que el plumín había dicho? ¡No! El pintor era bueno... Pero... si era así, ¿qué derecho tenía el pintor de hacer con él lo que quisiera? ¡El pincelito era el que se ensuciaba y el que se desgastaba al raspar contra el lienzo. ¿Por qué había de llevarse los laureles el pintor? Pintar con pincel

La sombra de esta incomodidad quedó flotando en el ánimo del pincelito... Al día siguiente, cuando el pintor lo tomó en sus manos, decidió que sería él quien dictaría los trazos. Así cuando el pintor quería realizar una línea, el pincelito hacía fuerza para pintarla en otra dirección. Cuando el pintor quería sopar el pincel en un color, él apuntaba hacia otro tarrito de pintura. El pintor no entendía qué estaba sucediendo, puesto que en el lienzo tan solo aparecieron manchones deformes e improlijos. Luego de varios intentos fallidos, simplemente dejó al pincelito de lado y tomó otro para recomenzar su obra. Pintar con pincel

Esto puso aún más furioso a nuestro amiguito. ¿Quién se creía ese pintor que era para cambiarlo a él, al mejor, por un pincel cualquiera? ¡Ahora mismo se pondría él solo a pintar sin necesidad de que ese estúpido pintor lo manosease con sus manos sucias de pintura! Y así lo hizo. Se ubicó frente a un lienzo y con varios potes de pintura junto a él y comenzó a pintar. Todos observaban absortos al pincelito, incluso el pintor, que había dejado su trabajo, y al ver la satisfacción del plumín, comenzó a sospechar qué estaba ocurriendo. De más está decir, que tan solo una masa informe de colores superpuestos apareció sobre el lienzo. Y todos se rieron de él... Pintar con pincel

Nuestro amiguito, avergonzado, deprimido y frustrado se retiró a llorar lágrimas de pintura en su vaso. Había hecho el ridículo. Todos se habían reído de él. Todos... menos el pintor, que lo tomó dulcemente en sus manos y le dijo: "Querido amiguito, yo sé que tú eres el mejor, pero eres el mejor en mis manos. No eres un esclavo en mis manos, sino que juntos, los dos, pintamos. Así como yo te necesito a tí, tú me necesitas a mí. Sólo dejándote conducir por mis manos podemos crear juntos la belleza. El que sea yo quien dirige tus movimientos no te quita mérito, no, sino que por el contrario te enaltece, porque yo te elijo a ti entre todos los otros pinceles. ¿Nunca lo habías pensado así? Yo te amo, y te elijo a ti, entre muchos otros, cada vez que te utilizo. Y ahora sécate esas lágrimas, y vamos a seguir pintando". Pintar con pincel

Y el pincelito comprendió que en su naturaleza de pincel estaba el dejarse conducir por las manos del pintor, que sólo así podía ser lo que él era: un pincel."


Pintar con pincel

La Muñeca Matrioska


La muñeca Matrioska

La muñeca Matrioska. Había una vez un virtuoso carpintero ruso llamado Serguei, que se ganaba la vida tallando los más hermosos objetos de madera: instrumentos musicales, juguetes… Todas las semanas, se enfrentaba al frío del bosque para buscar madera y así construir nuevos objetos. La muñeca Matrioska

La mañana que le tocaba salir para recolectar material, se encontró todo el campo cubierto de una gruesa capa de nieve. La noche había sido cruenta, y el carpintero rezó para que la fortuna le sonriera. Sin embargo, toda la madera que encontraba en su camino estaba húmeda, y tan sólo le servía para calentarse al fuego.

Abatido por el cansancio, decidió retornar a su hogar y probar suerte al día siguiente. Cuando se disponía a dar media vuelta, le llamó la atención un bulto que sobresalía de un árbol. Al acercarse, comprobó que se trataba de un trozo de madera espléndido, el más bello que había visto en su vida. Presto como el rayo, regresó a su estudio, pero tardó varios días en decidir qué tallar. Finalmente, se decidió e ideó una preciosa muñeca. La muñeca Matrioska

Era tan bonita, que convino no venderla sino quedársela para que le hiciera compañía. “Te llamaré Matrioska“, dijo a la inerte figura. Cada mañana, al levantarse se dirigía a su única compañera: “buenos días, Matrioska”. Un día, ésta le respondió: “buenos días, Serguei”. El carpintero se sorprendió, pero en vez de sentir miedo, se sintió feliz por tener alguien con quien hablar.

Al tiempo, el carpintero percibió que Matrioska estaba triste y le preguntó qué le ocurría. Ésta le contestó que veía cómo todo el mundo tenía un hijo o hija, y que ella anhelaba tener uno. “Tendré que abrirte y sacar madera de ti, y eso será muy doloroso”, le contestó Serguei. A lo que ella le replicó: “En la vida, las cosas importantes requieren de pequeños sacrificios”. Y ni corto ni perezoso, éste talló una réplica, más pequeña, y la llamó Trioska. Ya no sentiría sola. La muñeca Matrioska

Pero el instinto maternal se apoderó también de Trioska y Serguei accedió a que ésta también tuviera una hijita. Esta vez se llamaría Oska. Pero Oska también quería descendencia. El carpintero comprobó que apenas quedaba madera dentro de Oska, como mucho podría haber una muñequita más. Tras reflexionar, talló un muñeco diminuto -al que bautizó como Ka- con bigotes, lo puso frente al espejo y le dijo: “eres un hombre no puedes tener hijos”. La muñeca Matrioska

Entonces, metió a Ka dentro de Oska. A Oska dentro de Trioska y a Trioska dentro de Matrioska. Un día, misteriosamente, Matrioska desapareció con toda su familia dentro. Serguei quedó desolado.


La muñeca Matrioska

Amor en pareja

Amor en pareja

Amor en pareja. Un esposo fue a visitar a un sabio consejero y le dijo que ya no quería a su mujer y que pensaba separarse.

El sabio lo escucho, lo miro a los ojos y solamente le dijo una palabra:

”Ámela”… y luego cayó. Amor en pareja

”Pero es que ya no siento nada por ella”.

”Ámela” repuso el sabio.

Ante el desconcierto del hombre, el sabio agrego lo siguiente:

”Amar es una decisión, no un sentimiento”. Amor en pareja

Amar es dedicación y entrega.

Amar es un verbo y el fruto de esa acción es el amor.

El amor es un ejercicio de jardinería:

Arranque lo que hace daño. Amor en pareja

Prepare el terreno, siembre, sea paciente, riegue y cuide.

Esté preparado porque habrá plagas, sequías o excesos de lluvias.

Más no por eso, abandone el jardín. Amor en pareja

Ame a su pareja, es decir: acéptela, valórela, respétela, déle afecto y ternura, admírela y compréndala.

Y eso es todo: ”Ámela”


Amor en pareja

Comprador de monos



Comprador de monos

Comprador de monos. Una vez llegó al pueblo un señor, bien vestido, se instaló en el único hotel que había, y puso un aviso en la única página del periódico local, que está dispuesto a comprar cada mono que le traigan por $10.

Los campesinos, que sabían que el bosque estaba lleno de monos, salieron corriendo a cazar monos. El hombre compró, como había prometido en el aviso, los cientos de monos que le trajeron a $10 cada uno sin chistar. Comprador de monos

Pero, como ya quedaban muy pocos monos en el bosque, y era difícil cazarlos, los campesinos perdieron interés, entonces el hombre ofreció $20 por cada mono, y los campesinos corrieron otra vez al bosque.
Nuevamente, fueron mermando los monos, y el hombre elevó la oferta a $25, y los campesinos volvieron al bosque, cazando los pocos monos que quedaban, hasta que ya era casi imposible encontrar uno. Comprador de monos

Llegado a este punto, el hombre ofreció $50 por cada mono, pero, como tenia negocios que atender en la ciudad, dejaría a cargo de su ayudante el negocio de la compra de monos.

Una vez que viajó el hombre a la ciudad, su ayudante se dirigió a los campesinos diciéndoles:
- Fíjense en esta jaula llena de miles de monos que mi jefe compró para su colección. Yo les ofrezco venderles a ustedes los monos por $35, y cuando el jefe regrese de la ciudad, se los venden por $50 cada uno… Comprador de monos

Los campesinos juntaron todos sus ahorros y compraron los miles de monos que había en la gran jaula, y esperaron el regreso del ‘jefe’. Desde ese día, no volvieron a ver ni al ayudante ni al jefe. Lo único que vieron fue la jaula llena de monos que compraron con sus ahorros de toda la vida. Comprador de monos
Ésta es una metáfora de la especulación.

“Campesino que especuló, con los monos se quedó”

Comprador de monos

Mi mejor empresa



Mi mejor empresa

Mi mejor empresa. Ahora que he muerto...
¿Qué sucede?, no entiendo, solo sentí un dolor fuerte en la cabeza, mareos... y ahora estoy tan confundido. ¿Qué pasa? ¿por qué mi esposa corre y llora?

Dicen que morí, pero no, estoy aquí pero ellos no me ven y no puedo abrazarlos...
¡Oh! ya veo, están trasladando a alguien en una carroza fúnebre, soy yo mismo, que extraño. Veo a mi familia con gran dolor, todos lloran, pero yo solo veo, ya no siento dolor ni tristeza, es como ser un espectador…

Pasan los días, mi familia regresa a casa sin mí, les he dejado un gran vacío...
Ya alguien ocupa mi puesto de trabajo, todo vuelve a ser como antes, corren, atienden llamadas, hacen pagos, envían documentos, firman planillas, en fin es como si nunca hubiese faltado yo, que bien, algunos compañeros se acuerdan de mí a ratos y lamentan que ya no esté… Mi mejor empresa

Sin embargo en mi familia, el vacío persiste, mi esposa llora, está confundida, no sabe como hacer sin mi, mi hija pequeña pregunta: ¿Dónde esta papá? y mi esposa le dice que en el Cielo…

Mi hija mayor acaba de comprender dolorosamente lo que es la muerte, no deja de llorar, no quiere ir a clases, no se puede concentrar, tampoco come…

Mi perro se paro en la puerta y de ahí no hay quien lo saque, come, bebe agua y regresa a su puesto de espera... Mi mejor empresa

Pasa el tiempo, mi hijo cumple cuatro años y yo no estoy, él se aferra a su mamá, se ha vuelto tímido y retraído, no hay una figura paterna para él, ya papá no está... Mi hija ya de 11 años casi no habla, a veces su mamá la encuentra llorando, bajó mucho las notas y no muestra interés por nada…

Mi querida esposa, con toda la carga sobre sus hombros, la responsabilidad de los hijos pequeños, tiene que sonreír a los niños para darles fortaleza...

Ya pasó un año y todo sigue igual, en casa el vacío, la tristeza, en la empresa donde trabajaba ya nadie me nombra y todo sigue igual sobre la marcha... Mi mejor empresa

¿Sabes que dijo el forense? Que morí por stress, en mi cerebro reventó una vena por una subida de tensión que me dio, cuando me llamaron de mi trabajo y me dijeron que de los 10 camiones que solicite solo llegaron 7...

Y todo acabó... Ahora me doy cuenta que para la empresa que trabajas siempre serás uno más, completamente reemplazable en cualquier momento, pero que para mi familia era único e irreemplazable… Mi mejor empresa

Ahora me he dado cuenta que mi mejor empresa siempre fue mi familia… mi querida familia...

Por favor dedícate a lo que de verdad es importante, todos necesitamos un trabajo que nos permita cubrir nuestras necesidades básicas, pero no te entregues a una empresa, entrégate a tus seres queridos... abraza a tus hijos, visita a tus padres, besa a tu esposa, llama a tus amigos, es a estos seres a quienes de verdad le harás falta cuando ya no estés...

No esperes a que sea demasiado tarde...

Mi mejor empresa

Reglas para vivir



Reglas para vivir

Reglas para vivir. No fijes tu objetivo en lo que otra gente considera importante. Solamente tú sabes lo que es mejor para ti.

No des por descontado las cosas más próximas a tu corazón. Aférrate a ellas como harías con tu vida, porque sin ellas la vida carece de sentido.

No socaves tu valía comparándote con los demás. Cada uno de nosotros es especial justamente porque somos diferentes. Reglas para vivir

No te entregues cuando aún tienes algo para dar. Nada se ha terminado verdaderamente hasta el instante en que dejas de intentarlo.

No temas aceptar que no eres perfecto. Es este frágil hilo el que nos une a los demás.

No dejes a la vida escurrirse entre tus dedos por vivir en el pasado, o vivir para el futuro. Viviendo tu vida un día cada vez, tendrás todos los días de tu vida. Reglas para vivir

No elimines el amor de tu vida por el solo hecho de pensar que es imposible de encontrar.

La manera más rápida de recibir amor es entregarlo, el modo más rápido de perder amor es agarrarlo demasiado fuerte; el mejor modo de conservar el amor es darle alas.

No tengas miedo de tomar riesgos. Es arriesgándonos como aprendemos a ser valientes. Reglas para vivir

No olvides que la mayor necesidad emocional de una persona es sentirse querido.

No temas aprender. El conocimiento no pesa, es un tesoro que siempre puedes llevar contigo fácilmente.

No emplees el tiempo o las palabras sin cuidado. Ninguno puede retirarse hacia atrás. Reglas para vivir

No corras por la vida tan rápido que olvides no sólo dónde has estado, sino también hacia dónde ibas.

La vida no es una carrera; más bien es un trayecto para saborear cada paso del camino.

Ayer es historia. Mañana es un misterio. Hoy es un regalo.

Reglas para vivir

Buscar lo mejor

Buscar lo mejor 


Buscar lo mejor

Buscar lo mejor. Cada persona es lo que elige ser, todo aquello que prefiere para sí misma. Dios no nos impone nada, simplemente nos ofrece, dejándonos la libertad de decidir y hacer.

La mayoría de las personas escogen los caminos fáciles, los coches, las joyas.

Existen caminos para los más diversos deseos, sin embargo hay cosas que la herrumbre no puede corroer. Son, la armonía, el bien, la alegría, los ideales nobles, la verdad.

¿Sería tan dificultoso escoger el amor a cambio del odio; la acción, en lugar de la comodidad; la paz, en lugar de la guerra; el perdón, en lugar de la envidia; la confianza en lugar del orgullo; la generosidad, en lugar del egoísmo; el corazón de un niño a cambio de la vanidad; el desprendimiento y la pobreza, en lugar de la satisfacción? Buscar lo mejor

¿Sería tan dificultoso escoger al creador en lugar de la criatura; el deber, el sacrificio, lo humano, lo correcto, la renuncia, en lugar del placer?
Esperemos que todos sepamos elegir: los niños, los jóvenes, las madres, los padres.
Debemos tomar decisiones en todo momento.

Siempre podremos elegir las mejores cosas: Dios, los hombres, la familia, en lugar de la evasión y de la irresponsabilidad; la unión, en lugar de las separaciones; la verdad, en lugar de la mentira; la luz en lugar de la oscuridad; la vida en compañía, en lugar de la soledad. Buscar lo mejor

Si queremos ser felices deberíamos decidirnos por lo difícil, lo verdadero, lo justo.
El sinónimo de felicidad es el sacrificio, la generosidad, la renuncia. Siempre acerca a todos tus seres queridos, tus hermanos, a vivir la armonía del día a día.

Todos necesitamos de la armonía, la que depende de nuestras elecciones, la que depende de nosotros mismos. Buscar lo mejor

Tratemos a todos con amabilidad.

La persona que viaja contigo a tu lado, no es tu competidor ni tu enemigo; es una persona a la que debes tratar de manera cordial y con toda amabilidad. Nunca rezonguemos con el fin de desahogarnos.

Más que ser consolados, busquemos consolar a los demás. Buscar lo mejor

Y, cuando menos nos demos cuenta nos serán recompensadas las generosidades de nuestro corazón.

Jamás será tarde para que hagamos el bien, para ser hermano, para decir; cuenta conmigo. Toda decisión será solo nuestra.

Pensemos y resolvámonos siempre, siempre para lo mejor.

Buscar lo mejor