· ¿quién eres? Dijo una voz.
· Soy la mujer del alcalde.
· Te he preguntado quién eres, no con quién estas casada.
· Soy la madre de 4 hijos.
· Te he preguntado quién eres, no cuantos hijos tienes.
· Soy una maestra de escuela.
· Te he preguntado quién eres, no cual es tú profesión. Y así sucesivamente. Respondiera lo que respondiera, no parecía poder dar una respuesta satisfactoria a la pregunta ¿quién eres?.
· Soy una cristiana
· Te he preguntado quién eres, no cual es tú religión.
· Soy una persona que iba todos los días a la iglesia y ayudaba a los pobres y necesitados.
· Te he preguntado quién eres, no lo que hacías. Evidentemente no consiguió pasar el exámen, porque fue enviada de nuevo a la tierra. Cuando se recuperó de su enfermedad, tomó la determinación de averiguar quién era. Y todo fue diferente.
Tú obligación es SER. No ser un personaje, ni ser un don nadie, porque ahí hay mucho de codicia y ambición, ni ser esto o lo de más allá, porque eso condiciona mucho, sino simplemente SER.
Antony de Mello.
4 comentarios:
Difícil despojarse de los roles, no?
¡Saludos!
es pregunta, tiene una respuesta, pero aveces puede que la encuentres al nacer o tengas que pasar toda una vida para descubrirla.
Soy el todo y la nada.mi
Pobre mujer no sabía quien era la voz le puso una tarea de averiguar quién era
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